Yo pagué mi pasaje y me fuí a sentar al último asiento del bus porque ya no habían lugares disponibles. Segundos después a mi lado se sienta una chica polaca bastante hermosa -como muchísimas chicas polacas-. Ella llevaba su bolso, una caja con revistas y papeles y para variar iba hablando por teléfono.
Mientras el bus avanzaba y ella continuaba hablando su caja y su cartera se caen al suelo. Ella no sabe si colgar o recoger las cosas o nada. Yo me agacho y comienzo a recoger sus cosas, por cortesía. Una chica del asiento de adelante hace lo propio. En fin ella termina de hablar por teléfono para recoger también sus cosas y comienza a hablar -obvio en polaco- sobre -supongo- sus cosas o si estaba avergonzada por tener todas sus cosas desparramadas en todo el bus o sobre la la cultura chupística, como no hablo polaco aún no sé que decía.
Mientras seguíamos recogiendo sus cosas, ella continuamente me hablaba -no sé de que- y me sonreía. Obvio -pensé- sigue avergonzada. Continuaba hablandome mientras revisaba sus cosas. Me sonreía bastante. Así que luego me puse a pensar... tal vez lo que debería pasar en esta situación es que yo tome la iniciativa de iniciar contacto verbal... pero wait... no hablo ni pito de polaco.
Todas las condiciones estaban dadas para que el contacto se dé. Yo siempre he sido tímido y se pueden contar con los dedos de una mano las veces que trate de abordar a una chica. Supongo que en otro contexto de mi vida y con un idioma al que estoy familiarizado el abordaje podría haber sido un éxito ya que las condiciones eran de película. La chica con paquetes, se le caen los paquetes y aparezco para salvar la situación, es holliwoodense.
Al llegar ella a su parada se paró, me dijo algo -adiós, o tal vez me dijo que me vaya a la mierda por huevón- y se bajó del bus. Yo continué mi camino con la duda de que hubiera pasado si...
No hay comentarios:
Publicar un comentario