Cuando vivía en La Paz, me gustaba ir ar estadio para ver los partidos del Tigre. Para mí uno de los grandes placeres de ir al estadio era ver al público y las diferentes formas que tenían para alentar o insultar a los jugadores. Uno puede encontrar muchas clases de hinchas y aquí voy a describirles a los que más recuerdo o a los que más me divertían.
Primero tenemos al desubicado, es aquel personaje que se disfraza con los colores de su equipo y se va a sentar cerca a los barrabravas del equipo contrario. Es el que resiste estoicamente y por mucho tiempo que le insulten, que le tiren basura y hasta que le canten directamente en la cara. Si su equipo mete gol se tiene que tragar el festejo porque si lo festeja puede acabar en el hospital; en cambio, si es el equipo contrario recibe burlas de todos los que están a su alrededor. Generalmente la policía interviene y se lo llevan escoltado a otro sector.
El líder es un tipo de oficina, por encima de los 35 que cuando era niño le gustaba ir a la barra. Ahora que la edad no le permite saltar y cantar por 90 minutos, es el que incita a otros a cantar y saltar. Se sabe todas las canciones de la barra, ve los partidos parado, con un cigarro en una mano y un café en la otra. Se los distingue por la vestimenta: Traje oscuro, corbata del color de su equipo y bufanda del equipo. Generalmente se reúne de otros de su clase para alentar e insultar en los estadios.
El malhumorado es muy fácil de distinguir. Desde que llega al estadio hasta que sale del estadio, está de mal humor. Reniega por todo y contra todos. No importa si su equipo esta ganando por seis goles, él siempre buscará los errores antes que las virtudes. Es el que insulta incluso a los vendedores de refrescos. Nadie se salva, desde el portero del equipo contrario hasta la mamá de la esposa del presidente del club. Lo bueno de estos individuos es que tienen un amplio repertorio de apodos e insultos para todos y todas, así que, mientras no te insulte, puedes disfrutar de este personaje.
También tenemos al hablador. Es el hombre de los datos. Te dice dónde y cuándo jugó X o Z jugador. Sabe los palmarés de todos los equipos habidos y por haber del mundo. Sabe qué lesiones tienen los jugadores e incluso qué hicieron la noche anterior. Este personaje se sienta en el mismo asiento desde el 1966. Es casi una leyenda del sector al que va. Todos lo conocen y se alejan paulatinamente de él porque es cansino.
Luego tenemos al entusiasta. Es el que canta, grita, alienta todo el partido. Es el que te abraza (sin conocerte) cuando tu club mete un gol. El problema de estos personajes es que no tienen compañía. Van solos al estadio en busca de amistades y hacen todo lo posible para poder llamar la atención. Entre los gestos y movimientos que demuestran, están: taparse la cara con las manos cuando alguien falla un gol; grita "uuuuuuhhhhh" cuando el balón pasa cerca del arco; canta las canciones alusivas contra el árbitro o contra algún jugador lesionado que se queda en el suelo. Es bueno tener a este personaje a una distancia prudente.
El hombre radio generalmente se sienta rodeado de decenas de personas por una simple razón: es el único que lleva una radio y la pone a todo volumen para que todo el sector pueda escucharla. Este sujeto siempre tendrá su nemesis, quién es el que critica la radio que escucha y le pide a gritos que ponga a la de su preferencia.
Entre las hinchas femeninas, las mejores son las histéricas. Son las que quieren dejar todo el alma en el estadio pero no lo hacen por etiqueta. Ellas generalmente llaman "burro" o "tonto" o "hijo de buda" a los jugadores cuando cometen errores. Gritan mucho y se enojan fácilmente. Van solas porque a sus novios o esposos no les gusta el fútbol tanto como a ellas.
Por último tenemos al bromista. Este personaje trata de encontrarle la gracia y el chiste a todo. Se burla de la vestimenta del equipo contrario. Del hombre que está sentado dos filas más abajo por su sombrero o bigote. Del juez de línea porque está pasado de peso. En fin, de todo. De las 100 bromas que puede hacer, el 75% de ellas son malas, el 20% son malísimas y un 5% son buenas. Junto a él se sientan tres o cuatro de sus amigos quienes permiten que diga todos sus chistes.
El fútbol sin estos personajes no sería el mismo. Al menos no para mí. Y si a tí no te gusta ir al fútbol, pues deberías ir alguna vez para desestresarte un poco insultando al que quieras sin que alguien te diga algo (al menos yo hacía eso).
Si ustedes van al fútbol, ¿como se comportan?
2 comentarios:
Jajjajaja creo q mi Daddy no encaja completamente con ninguno... el a veces va con la camiseta de Oriente... a veces va con ropa del trabajo... xq va saliendo de la oficina... el se sabe la trayectoria de muchos de los jugadores... pero solo habla si es q alguien le pregunta... el reniega y grita y grita... pero no mas de lo normal y por ultimo... el sale feliz si su equipo aparte de ganar Jugo bien! jejej... yo sin embargo... no me gusta ir mucho al stadium pero cuando voy... grito, canto... me levanto... y no puedo alejar la mirada de la cancha!... Saludos y Buen post!....♥
yo igual soy una mezcla de todos, insulto a todos, me burlo de todo, me quejo y canto a voz en cuello. Saludos!
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